programa de Envejecimiento y Vejez: Un Compromiso que Dignifica y Alegra a la Zona 9

En el corazón de Envigado, un compromiso con la dignidad y la alegría de nuestros mayores se ha convertido en una “maravillosa realidad en marcha”. El Programa de Envejecimiento y Vejez es más que una iniciativa; es la prueba tangible del bienestar y la unión comunitaria que se fomenta en nuestros barrios.

En Visión Z9, conversamos con Ruby Janeth García González, profesional del Centro Gerontológico y Vida Atardecer, quien con enorme pasión lidera este hermoso proceso. Ella nos recuerda que el programa va más allá de la asistencia, enfocándose en brindar actividades diarias que promueven un envejecimiento activo, saludable y lleno de vida.

“Es una propuesta que llevamos a los adultos mayores”, comenta Ruby, destacando eventos tan alegres como la “viejoteca” de Halloween, donde los usuarios disfrutan, bailan y se conectan.

Una Proyección que Une a Envigado

Aunque tiene una presencia importante en la Zona 9, el impacto del programa resuena en múltiples sectores. “No solo estamos presentes en la Zona 9, también hacemos presencia en los CEC de El Salado, El Escobero, Linares y San Marcos”, explica Ruby Janeth, demostrando el amplio alcance de esta política de bienestar social.

Esta visión es un pilar fundamental de la administración actual. El alcalde Raúl Eduardo Cardona ha enfatizado que esta Política Pública de Envejecimiento en Envigado es un derecho que busca garantizar el bienestar a largo plazo. “Estamos rompiendo paradigmas, aplicando tecnologías y construyendo colectivamente. No es una deuda con nuestros mayores, es una realidad”, afirmó el alcalde.

El programa no solo busca transformar la ciudad en términos de accesibilidad y oportunidades, sino también transformar la percepción del envejecimiento. Como destaca Ruby, se busca “generar acciones concretas que beneficien a este grupo poblacional”.

Desde Visión Z9, celebramos y agradecemos a Ruby Janeth García y a todos los que hacen posible este programa. Su labor diaria nos deja una lección invaluable: “envejecer también nos dignifica, nos inspira y nos une como comunidad”.

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